El Extremadura Plasencia viaja al País Vasco para intentar redimirse del gafe cada vez que juega en feudos foráneos. Las dos primeras jornadas, dos derrotas sobre la bocina. En Marín, derrota por un punto, y en Salamanca, derrota por tres puntos.
Con los fantasmas de la temporada pasada en la que cada partido fuera de casa se transforma en auténtico calvario con derrotas por pocos puntos tras ir venciendo gran parte del encuentro y derrotas estrepitosas, el Extremadura Plasencia quiere acabar cuanto antes con esta maldición, llevada a más en Salamanca. Tras derrotar al líder con un gran trabajo durante los 40 minutos de juego, los placentinos deben dar un paso hacia adelante y traerse la victoria del País Vasco.
Juaristi ISB
Con un balance de dos victorias y tres derrotas llegan los vascos al encuentro. No conocen lo que es ganar fuera de casa pero han hecho del Municipal de Azpeitia un auténtico fortín. Los dos enfrentamientos en casa los han solventado por 90-85 y 74-72 frente a Cantabria Estela y Círculo Gijón respectivamente.
En su último choque cayeron derrotados en la pista de Clavijo por 74-67 con Everald Powell y Marshall James superando la decena de puntos.
Un conjunto en el que Powell es su máximo exponente y que supera de forma raspada los 70 puntos de media por partido siendo el segundo equipo peor valorado.
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